Hidrógeno: ¿la energía del futuro?
HIDRÓGENO
El “ABC de la H”: hidrógeno
Aunque no te des cuenta, tú – junto con todas las otras personas del planeta– enfrentamos un desafío urgente: cómo detener el cambio climático sin desarticular la economía energética global. Esto puede significar varias cosas, que siempre apagues las luces cuando sales de tu casa, que manejes un automóvil respetuoso con el medio ambiente, o que trabajes para transformar las principales fuentes de energía a nivel mundial. Cada quien hace su parte, pero lo cierto es que todos tenemos un papel si queremos resolver este problema urgente.
Las tecnologías eólicas y solares bien pueden parecer la solución obvia. Sin embargo, no entregan un suministro constante de energía, el cual se requiere para mantener nuestros hogares y empresas, además de que por el momento, no tenemos una opción óptima para almacenar ese tipo de energía. Las baterías y otras soluciones existentes no son del tamaño necesario o lo suficientemente económicos para satisfacer la demanda energética pico cuando no sopla el viento ni brilla el sol. Lo que necesitamos es una solución económicamente viable que combine un combustible con cero emisiones, una tecnología que pueda llenar esos vacíos inherentes y sustituir completamente a los combustibles fósiles.
Como respuesta al problema, se está dando un esfuerzo renovado para incorporar una fuente energética que ha existido desde el principio del tiempo: el hidrogeno, o sea, H.
¿Qué es el Hidrógeno?
Hidrógeno es el átomo más pequeño y liviano, la sustancia más abundante del universo y la fuente más rica de energía de las estrellas. En la Tabla Periódica, ocupa el puesto No. 1.
El hidrógeno puro ocurre en el planeta Tierra únicamente en forma molecular (H2) y típicamente se encuentra en compuestos como el gas natural, biomasas, alcoholes y agua (H2O). Ya que para convertir estos compuestos en hidrógeno puro se requiere energía, por lo general pensamos en el hidrógeno más bien como una especie de portador de energía o medio de almacenamiento, en vez de como una fuente energética por si misma. El mercado de hidrógeno actualmente produce al añounos 70 millones de toneladas métrica y se anticipa que llegará a producir 121 toneladas métricas para el año 2026.1
¿Cómo se produce el Hidrógeno?
El concepto de una economía sostenible de combustibles a base de hidrógeno apenas está comenzando a tomar impulso. Pero la tecnología para producir hidrógeno se ha venido desarrollando desde el siglo 19.
Hoy, el hidrógeno se produce comercialmente de cuatro maneras. Tres de ellas – reformación de vapor de metano (SMR), oxidación y regasificación – requieren el uso de combustibles fósiles. De hecho, el 95% del hidrógeno producido hoy día se produce con combustibles fósiles.2
La cuarta solución es electrólisis, que, cuando se complementa con renovables, crea una fuente de combustible de cero emisiones: hidrógeno “verde”, la solución que quizás sea nuestro boleto para llegar a un futuro verde.
¿Qué es electrólisis?
La electrólisis utiliza una corriente eléctrica para fraccionar las moléculas de agua (H2O) en hidrógeno (H2) y oxígeno (O). Actualmente, la electrólisis genera únicamente el 5% de la producción global de hidrógeno y la mayor parte de eso todavía usa gas natural u otras fuentes convencionales de electricidad.3 Para generar hidrógeno puro y netamente “verde”, será necesario que la electrólisis utilice energías renovables.
La buena noticia es que la tecnología de electrólisis se puede combinar fácilmente con recursos eólicos o solares para producir hidrógeno. Usando ese hidrógeno “verde” para complementar esas fuentes de energía intermitente, podría hacer que los renovables se conviertan en una fuente energética práctica y económicamente viable y podría hasta funcionar como un catalizador poderoso para promover su amplia adopción.
¿Por qué el hidrógeno “verde” es tan bueno para los renovables?
Los expertos ya sabían, desde hace muchos años, que el hidrógeno tiene el potencial de almacenar energía renovable a largo plazo. Con los importantes adelantos tecnológicos de los últimos 50 años, creemos que el hidrógeno “verde” realmente podría ser el verdadero combustible del futuro.